Esto nos ilustra lo determinante que es la aplicación de un buen sistema hermenéutico en la labor exegética. De ahí dependen los buenos resultados en la interpretación del texto bíblico. De ninguna manera se deben usar arbitrariamente las Escrituras. Por lo general un texto tiene sólo un sentido y el exegeta tiene la responsabilidad de descubrirlo. El éxito en esta empresa está condicionado por el método utilizado. El hombre de Dios será un obrero aprobado, en la medida que usa bien la palabra de
Page 12